Las altas temperaturas. El incremento del monóxido de carbono que provoca que árboles, plantas y hierbas produzcan más polen.
Las temporadas más propensas a producir enfermedades del tipo
respiratorias como las alergias tenderán a ser cada vez más largas y se estima
un aumento del 200% en la producción de polen anual. El grado de incidencia
depende del lugar en el que uno vive y de las especies de plantas que
predominan en la zona.
En el caso del asma se ha observado que es más frecuente en países ricos que en pobres y que
predomina mucho más en las
zonas urbanas con respecto a las zonas rurales. Entre
los factores
ambientales implicados estarían incluidos los relacionados con la exposición a nuevos alérgenos y
contaminantes, tanto de interior (humo del tabaco) como de exterior (polución
ambiental).
La disminución de las
precipitaciones a su vez origina que especies más débiles de plantas
desaparezcan en algunas zonas y estén siendo sustituidas por otras más
resistentes y alergénicas. Dichas plantas producen pólenes más agresivos y que
permanecen más tiempo en la atmósfera.
Qué es una alergia
La alergia es una reacción
patológica del sistema inmune del organismo –que, en condiciones normales, se
encarga de proteger ante las infecciones y los tumores- caracterizada por una
respuesta inflamatoria exagerada ante algunos estímulos.
Cómo detectar alergias en los niños y niñas
Algunas alergias son
fáciles de identificar por el patrón de síntomas que viene después de la
exposición a alguna sustancia en particular. Pero otras son sutiles y se pueden
hacer pasar por otras afecciones. Se tratan de síntomas repetidos o parecidos a
los de un resfriado crónico que duran más de una semana o dos, o que se
desencadenan casi siempre durante la misma época del año. Algunos de estos
son: Goteo nasal, congestión nasal, estornudos, carraspeo de garganta, frotarse
la nariz, sorber la nariz, picazón en los ojos, ojos llorosos, entre otros.
Tratamientos
El
tratamiento de los procesos alérgicos puede enfocarse desde tres grandes
perspectivas: preventiva, sintomática o etiológica. El tratamiento preventivo
es el basado en el control ambiental, la desalergización o la evitación del
agente causal de la reacción alérgica. Indudablemente, resulta el más efectivo,
pero, por desgracia, no siempre es factible. Dentro del ámbito de los
tratamientos sintomáticos, se incluirían todas aquellas familias de fármacos
que, si bien no van a resolver el problema de fondo, contrarrestan o compensan
los diferentes mecanismos de una reacción alérgica que acaba provocando las
manifestaciones clínicas.